La tecnología en construcción y reformas de viviendas avanza de forma constante. Aparecen nuevos materiales, nuevas técnicas… Y una de esas innovaciones es la de instalar un plato de ducha a ras de suelo.
En Reformas Rober cada vez recibimos más llamadas de clientes de Donostia-San Sebastián solicitando información sobre este tipo de plato ducha y consultando sus ventajas, precios, dificultades de instalación…
En términos de reformas de baños, hemos pasado en pocos años del cambio de bañera por ducha, a instalar el plato de ducha a ras de suelo. Muchos clientes deciden dar el gran salto y optar por un plato de ducha a ras de suelo y no tener que salvar esos 4 centímetro de altura que supone un plato de ducha tradicional.
La principal ventaja de un plato de ducha a ras de suelo se encuentra precisamente en ese pequeño obstáculo que sobresale en los platos de ducha que todos conocemos. Como decíamos, son únicamente 4 centímetros, pero para una persona con movilidad reducida puede ser un gran obstáculo.
Hablamos de un alto grado de movilidad reducida, donde las personas tienen la necesidad de ducharse sentadas en una silla de ruedas adaptada para el uso en la ducha. No es lo mismo acceder a la ducha directamente y sin obstáculos, con un plato de ducha a ras de suelo, que tener que hacer una pesada maniobra levantando la silla con el peso de la persona que se sienta sobre ella. Haciendo fuerza se consigue, pero es una tarea que con el paso de los días se acaba haciendo tediosa y pesada.
A veces no hay más remedio que continuar así, pero si está en disposición de actuar con tiempo y puede realizar el plato de ducha a ras de suelo, puede ser una buena forma de anticiparse a los problemas que podamos padecer en un futuro y especialmente en la vejez. Tarde o temprano, todos acabaremos teniendo achaques en el cuerpo. Es ley de vida.
Otra de las ventajas de instalar un plato de ducha a ras de suelo es la estética del baño. Todo es más uniforme y minimalista. Y crea un mejor ambiente en la estética del baño.
Todo son ventajas cuando hablamos de cambiar la bañera por un plato de ducha, y más todavía si hablamos de instalar un plato de ducha a ras de suelo. Pero antes de eso tenemos que asegurarnos que esta reforma será posible en tu baño.
Un plato de ducha necesita una pendiente de unos 7 centímetros, desde el desagüe de la ducha hasta la bajante, para que el agua no se estanque en las tuberías y fluya de forma correcta hasta la tubería principal de la vivienda, mediante la cual el agua irá finalmente al alcantarillado de la calle.
Si nuestros albañiles comprueban que no se cumple este requisito, no podremos colocar el plato de ducha a ras de suelo en su vivienda de Donostia-San Sebastián y habrá que optar por el plato de ducha tradicional. Esto depende de la construcción de la vivienda, del forjado, de la distancia entre la ducha y la bajante… En Reformas Rober nos encargamos de analizar su vivienda para ver si es posible hacer la reforma en su baño.
Si tiene alguna duda más acerca del plato de ducha a ras del suelo o le gustaría conocer el coste de la obra, llámenos o escríbanos sin compromiso a Reformas Rober.